Imagen de archivo de una vista general de la población asturiana de Sostres. EFE/voo

La Junta General rechaza la ley del PP para proteger olores y sonidos del campo asturiano

Oviedo (EFE).- La propuesta del Partido Popular para proteger por ley los sonidos y olores propios del medio rural asturiano no ha sido tenida en cuenta en el pleno de la Junta General del Principado ya que socialistas, IU y la diputada Covadonga Tomé han votado en su contra al considerar que en la práctica iba a ser inaplicable y no serviría para resolver los conflictos entre turistas y la gente de los pueblos.

El PP planteaba en su proposición de ley que olores a estiércol, purines, cubiles o humo se incluyesen entre ese patrimonio sensorial a proteger, al igual que los sonidos emitidos por vacas, caballos, burros, gallos y otros animales de granja o domésticos y los ruidos generados por cencerros, campanas, cadenas ordeñadoras, tractores, segadoras, motosierras, taladros o radiales, entre otras herramientas.

Según el portavoz adjunto del PP en el parlamento autonómico, Luis Venta, se trataba de una iniciativa pionera a nivel nacional e inspirada en una normativa estatal sa con la que evitar conflictos que puedan surgir por el desarrollo de los trabajos propios de quienes se dedican a la agricultura y ganadería con turistas o residentes en el medio rural ajenos a esas actividades.

El texto, contaba con el apoyo de todas las organizaciones agrarias y de las 39 parroquias rurales que hay en Asturias con el fin de proteger la cultura ligada al medio rural y evitar la conflictividad.

Según Venta, ha habido ya cientos de conflictos que han generado situaciones violentas o han acabado en los juzgados con denuncias a ganaderos y vecinos por «supuestas molestias» que podrían evitarse con una ley en defensa de la ruralidad.
Apoyo de Vox y Foro

Su propuesta ha contado con el apoyo del diputado de Foro, Adrián Pumares, y de Vox, aunque la portavoz de este grupo, Carolina López, ha arremetido contra los populares por considerar que «agachan las orejas» y defienden las mismas políticas que los socialistas.

«Frente a esta izquierda que no sabe hacer la o con un canuto, el PP al final agacha las orejas y hace lo mismo que los socialistas, empezando por la agenda ecologista que ha posibilitado la aprobación de la ley de bienestar animal que tanto daño ha hecho a la ganadería», ha señalado la portavoz de Vox.

López ha criticado también que desde las filas populares hayan compensado por cortesía parlamentaria la ausencia de una diputada de IU en el pleno de hoy «porque no se puede tender la mano a un gobierno que está arruinando a Asturias».

En su opinión, si el PP quiere proteger de verdad al campo debería alejarse de las políticas socialistas y de los «ecologistas de salón y ecotóxicos que creen que el campo se mantiene solo por arte de magia o es una escena de Disney en la que ellos son los protagonistas».

Dudas e indefinición

Para la socialista Noelia Macías, la propuesta del PP «genera falsas expectativas» porque está llena de dudas jurídicas, no tiene claro el ámbito competencial y es de difícil aplicación práctica dada su indefinición y falta de concreción que hace que esté abierta a interpretaciones de todo tipo.

Para los socialistas, esta proposición de ley para proteger el patrimonio sensorial asturiano no es la solución para solventar los problemas de convivencia en el campo español que, a diferencia de Francia, sí cuenta con un marco legal para regular los conflictos de vecindad.

Tras afirmar que entienden los objetivos, pero que no pueden apoyar una mera declaración de intenciones, Macías ha avanzado que su grupo pedirá al Gobierno que dentro del Pacto Rural se estudien mecanismos para proteger elementos de la cultura y forma de vida del medio rural.

El portavoz de IU, Xabel Vegas, también ha reconocido que están de acuerdo con el fondo de una iniciativa que han calificado de peculiar, ambigua y que les hace preguntarse si hay que llevar «la protección de este patrimonio a un exceso que raya el absurdo».

«Es bienintencionada, pero demasiado vaga, técnicamente deficiente y absolutamente inaplicable», ha añadido Vegas, para quien no hay que sobredimensionar el choque entre el mundo rural y el urbano, y sí tener en cuenta que, ante la imbecilidad de algunos turistas, es preferible concienciar y fomentar el respeto mutuo a regularlo por ley.

La diputada del Grupo Mixto Covadonga Tomé también ha asumido que la llegada de nuevos vecinos y turistas al medio rural ha acarreado conflictos pero ha asegurado que éstos pueden ser solucionados con el Código Penal y las ordenanzas municipales vigentes. EFE