Ciudad de México (EFE).- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, junto con la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) de México, a través de la Misión Permanente de México ante la Organización de Estados Americanos (OEA), expresaron su «firme rechazo» a las recomendaciones contenidas en el informe preliminar de los observadores enviados al país para la inédita elección del Poder Judicial del pasado 1 de junio, al asegurar que la OEA «rebasó su mandato».
«No está dentro de sus funciones dar recomendaciones de cómo un país debe decidir su Poder Judicial”, declaró Sheinbaum a medios sobre el informe en una parada de una gira de trabajo que cumple por el estado de Morelos, vecino a Ciudad de México, en el centro del país.

Por su parte, la SRE subrayó que una misión de observación de la OEA «no cuenta con la facultad para tratar de imponer sus propios criterios sobre la forma en que los países, en uso de su soberanía, deben conformar su poder judicial. Menos aún, de emitir juicios de valor que rebasan sus atribuciones».
La cancillería mexicana también se manifestó al respecto
En la nota diplomática dirigida al secretario general de la OEA, el surinamés Albert Ramdin, la Cancillería mexicana dejó constancia que la MOE «rebasó el mandato de la misma e incurrió en acciones contrarias a los principios de la Carta de la Organización».

En particular, citó el Gobierno mexicano, el Artículo 3 (e) que señala: “todo Estado tiene derecho a elegir, sin injerencias externas, su sistema político, económico y social, y a organizarse en la forma que más le convenga”.
Y, agregó, que como lo señala el propio informe, la organización del proceso electoral y la celebración de los comicios del 1 de junio «se apegó estrictamente a las normas constitucionales y leyes electorales vigentes en México».
El informe preliminar de la OEA
El viernes, en su informe preliminar, la Misión de la OEA afirmó que este modelo no tiene precedentes a nivel mundial y que lejos de fortalecer la justicia, podría debilitar su imparcialidad, independencia y eficacia.
Además de no recomendar el modelo, cuestionó la idoneidad de los perfiles de los candidatos, al no haberse aplicado exámenes estandarizados en los procesos de selección.
El organismo transmitió su preocupación ante los votos nulos y no marcados, que representaron el 10,80 % de la elección y señaló que se debió al plazo tan breve en el que se desarrollaron estos comicios.
Para las próximas elecciones judiciales, previstas para 2027, la OEA advirtió que podrían coincidir con los comicios en todo el país y, de no modificarse el calendario electoral, aumentaría el riesgo de influencias partidistas.
Por su parte, el domingo 1 de junio se llevaron a cabo en México las primeras elecciones de más de 880 cargos judiciales federales, entre los que se eligió a nueve ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), resultado de una reforma constitucional del expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024).}