El rector de la Universidad de Córdoba (Colombia), Jairo Miguel Torres, en Logroño. EFE/ Raquel Manzanares

El rector de la Universidad de Córdoba (Colombia) aboga por reforzar la ciencia en español

Logroño (EFE).- El rector de la Universidad de Córdoba (Colombia), Jairo Miguel Torres, ha dicho este jueves a EFE que hay que reforzar la educación superior centrada en el idioma español, porque el desarrollo de la ciencia se ha centrado en el inglés en Iberoamérica.

Torres ha intervenido en Logroño en la mesa redonda ‘La dimensión social de la universidad’, dentro de las XIV Jornadas Futuro en Español, organizadas por organizadas por el Grupo Vocento y el diario La Rioja.

El rector de la Universidad de Córdoba (Colombia), Jairo Miguel Torres, en Logroño. EFE/ Raquel Manzanares

Para este rector colombiano, hay que «afianzar» el español porque es un idioma que hablan 600 millones de personas en el mundo.

Responsabilidad social

Ha apelado a la «responsabilidad social» de las universidades y al compromiso que tienen de responder a sus territorios y comunidades, a través de la transferencia de conocimiento que generan con la investigación científica.

En el caso de la universidad de Córdoba, que tiene 60 años de historia y unos 18.000 alumnos, su principal fortaleza es su dedicación al sector agrícola.

Ha explicado que esta universidad está ubicada en el Valle del Sinú, que es «uno de los valles más fértiles del mundo», por lo que sus investigaciones y su formación se han centrado en responder a la vocación productiva de la zona.

Miedo a pisar la calle

En estas jornadas también ha participado la vicerrectora de Profesorado y Acción Cultural de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), María Teresa Santa María, quien ha asegurado a EFE que los jóvenes actuales «tienen futuro», a pesar del «miedo» que pueda causar la influencia de la Inteligencia Artificial (IA).

La vicerrectora de Profesorado y Acción Cultural de UNIR, María Teresa Santa María. EFE/ Raquel Manzanares

Ha insistido en que hay que «valorar al ser humano» porque su aportación es «fundamental, única e irrepetible», ya que «no hay una máquina que sustituya a las personas en muchísimas de las tareas y de las funciones que desempeñan».

Algunos jóvenes, ha considerado, viven «en un mundo paralelo de realidad virtual, con miedo a pisar la calle», porque se ha creado «una generación sobreprotegida, asustada con los retos de la vida, que tiene cosa buenas y malas».